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martes, 7 de septiembre de 2010

Capítulo 9. ¡Tierra trágame!

¿Por qué aun no me había tragado la tierra? Era lo único que le pedía. Aun era temprano. Después de que ayer me levantara a la tres en casa de Andrea, no había quien me durmiese anoche hasta las cinco de la mañana.

Eran las diez y media, (temprano para mi, que era bastante dormilona y encima me acosté tarde…) y a pesar del sueño que tenía ya no podría dormirme de nuevo, no al recordar todo lo que pasó ayer.

Recuerdo que estábamos en el parque, donde nos dirigimos Andrea y yo tras recibir el mensaje de Helena, llevábamos ya un rato discutiendo.

-          ¿Dónde está Helena y que has hecho con ella?
-          No digas tonterías Andrea, esto es más difícil para mí que para vosotras. Ahora soy así, me he cansado de ser tan tonta.
-          Siempre has sido lista, ahora estas siendo tonta. –le dije aun intentando asimilar que Helena, mi amiga de toda la vida, quisiera escaparse con el inútil de Fran. Era la idiotez más grande que había escuchado nunca.
-          ¿Lista? Sacar buenas notas no me llena, estoy cansada de la monotonía con Álvaro, y mi familia es un desastre… en pleno divorcio, mi madre con otro y mi padre no me hace ni caso, siempre viajando y vosotras… en fin ¿bueno y que me decís, me ayudáis? –estaba apunto de darle una torta.
-          ¿Encima no querrás que te ayudemos a semejante chiquillada no? –le dijo Andrea más serena.
-          Pues vaya amigas, y no me vengáis otra vez con el cuento de lo que es mejor para mi, ¿¡sabre yo lo que es lo mejor!?
-          Mira Helena si quieres hacer la gilipollas, ¡adelante, hazlo! pero a mi me dejas fuera de esto. Suficiente estúpido ha sido lo que le has hecho a Álvaro y encima con Fran, ¿acaso no lo conoces? ¿¡No tienes ni un poquito de personalidad!? Vas de madura y al final eres la peor, siempre te dejas llevar por los imbéciles.
-          ¿A quién estás llamando tu imbécil? –Genial, el que faltaba.
-          ¡A ti! Por que eso es lo que eres. – Fran no me imponía ni un poco.
-          Serás niñata, Helena hace lo que le da la gana, ya se que quieres que siempre te vaya detrás como tu perrito, pero ya no es tan tonta, gracias a mi. –sus ojos marrones eran cortantes, estaba muy cerca de mi, desafiante pero no me daba miedo ni  me hacia daño, pero me llenaba de ira e iba a explotar como no se callara. –Así que… -suspiró y se apaciguó, pero seguía sin tener buena pinta. –o te callas niñata, o te parto la cara. –dio un golpe suave en mi cara, y no pude más. Le di una patada en sus partes nobles, me dolía hasta a mi sin tener yo nada de eso. Fran estaba agonizando pero hasta con cara de dolor intento abalanzarse sobre mi. Andrea lo empujo para que no me alcanzara y un hombre que pasaba por allí lo agarró, y poco a poco empezó a calmarse.

-          Fran por favor déjala no sabe lo que dice. – le dijo Helena. Esto era para morirse pero ahora era mejor callarme.
-          Me voy –Fran intentaba zafarse, el hombre lo soltó y se fue, creo que iba diciendo algo como “estos chavales de hoy en día…” – pero que sepas, que eso de que quieres que ella siempre sea tu perrito faldero, me lo ha dicho ella misma, parece que no la conoces también ¿eh?
-          ¿Qué? –pregunte de forma casi inaudible. No hizo falta que contestara, helena no sabia mentir, su silencio otorgó un claro “si, lo dije”.




No supe más de Helena, tampoco quería. No podía creerme que pensara en mi de esa forma, no podía creerme que Fran me fuese a pegar y ni siquiera me defendiera. Era cierto que estábamos algo distanciadas pero no para tanto. No sabía que hacer, toda la tarde de ayer la pasé dándole vueltas al tarro, encerrada en mi habitación e incomunicada del mundo, ni siquiera encendí el ordenador.


-          Corazón, ¿estás despierta? – gritó una voz desde abajo. Este hombre nunca me iba a llamar por mi nombre, pero me encantaban sus apelativos cariñosos.
-          ¡Sí, papa! –escuchaba sus pasos al subir. Entró en mi habitación y se sentó al borde de la cama. Traía algo en las manos.
-          Dice tu madre que coloques esta ropa, que ya esta lavada. –era la ropa que había traído de casa de Andrea. No se porque mi padre la miraba con cara rara, supongo que por lo poco que le gustaba el corto vestido que me puse - Baja a desayunar anda, que anoche ni cenaste.
-          Vale. –dije tapándome  la cara con la almohada.
-          Nos vamos a ir en un rato a la playa con tus tíos y primos, ¿te vas a venir?
-          ¿En que playa vais a estar?
-          En la que esta al lado de la casa de tu amiga Helena. vente y cuando estés allí te pasas a buscarla, es lo que hacéis siempre – lo que hacíamos siempre…
-          No, me duele un poco la cabeza.

Me acababa de dar una ducha porque tenía unas pintas horribles, más de las que suelo tener todas las mañanas. Entré en mi habitación liada en la toalla.

-          ¡Nos vamos! -Gritó mi madre.

Acababa de ponerme la ropa interior cuando sonó el telefonillo. Caminé por el pasillo de arriba donde se encontraba uno de los interruptores para abrir la puerta. No me moleste en mirar quien era por el video porque no hacia ni 2 minutos que habían salido, seguro que era mi hermano que se le habría olvidado algo como siempre. Entré de nuevo en mi habitación y pensé que ponerme. No me iba a poner de nuevo el pijama, pero tampoco pensaba salir, ¿para que iba a pensar mucho que ponerme? 

Llevaba unos minutos rebuscando algo cómodo por el armario, buscar algo y no encontrarlo me ponía de mala leche. Siempre he pensado que todas las cosas deberían llevar un chip, como los animales, y tener una maquinita en la que escribieses “ropa cómoda” y ella muy amable mente te indicara… ¿¡Por qué se habría sola la puerta de mi cuarto!?

-          ¿Celes…? -un rostro muy conocido asomo por la puerta y me vio… ¡en paños menores!
-          ¡¡¡¡Ahhhhhhhhhh!!!! – ¡tierra trágame de una maldita vez!, pensé.
-          Perdón, perdón, perdón, perdón, perdón. –se escuchaba tras la puerta que se cerró bruscamente.
-          Lucas ¿¡como has entrado!? –dije mientras buscaba desesperadamente algo que ponerme. Me puse el pantalón del pijama y en la ropa que mi padre trajo había una camiseta, no me moleste en mirar cual era, pero me quedaba enorme, tapaba el pantalón, aunque tampoco era muy largo…Intenté poner mi pelo en orden y le dije. –Pasa.
-          He entrado por la puerta, me has abierto tú. Me ha extrañado que nadie me recibiera así que pensé que estabas sola y que sabias que era yo. Tienes cámara en la puerta, ¿sabes? –dijo al entrar.
-          Lo se, pero pensé que era mi hermano. ¿Qué haces aquí?
-          He venido a ver como estabas, Andrea me ha contado lo que pasó. –bocazas, la matare algún día. –y… a por eso. –dijo señalando mi camiseta.
-          ¿A por qué? –dije mirando la camiseta. ¡que hacia yo con su camiseta puesta! Por eso mi padre miraba así la ropa, dios mío que habrán pensado… tierra, o me tragas, o me hundo yo.
-          La dejé la otra noche entre tus cosas cuando me la quité. –dijo riéndose. Seguro que de la cara de espanto que se me quedó.
-          Me acabo de dar cuenta te lo prometo.
-          Se nota en la cara que se te ha quedado. Bueno entonces que, ¿me cuentas lo de ayer o me echas por allanamiento de morada? Quédate la camiseta, ya me la darás, en realidad solo era un pretexto para que mi madre me dejara salir, castigado a los casi 18, es deprimente. –dijo meneando la cabeza. Me reí, la vergüenza se había ido, Lucas hacia que todo fuera tan natural…
-          Mm... si quieres te puedes quedar aquí, no me apetece estar sola. Aunque si estas castigado no querrás enfadar a…
-          No, la verdad es que no quiero enfadar a mi madre, da miedo cuanto eso pasa. –rió. –pero me voy a quedar igualmente, lo soportaré. –me dijo sonriendo como solo el sabia hacer y le devolví la sonrisa.

Gracias tierra, por no haberme tragado. 

8 comentarios:

  1. Diosssss jajaja que verguenza...y que mal rato lo de Helena, y el payaso de Fran pegando a una chica...asqueroso.
    Lucas me tiene enamorada jajaja.

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  2. Woaahhh! Que verguenza ha tenido que pasar cuando la ha visto medio desnuda jajaja
    Me ha encantado sobretodo el final cuando lleva la camiseta de Lucas...
    Quiero saber mas de esta historia. Publica pronto ;)
    Besosss

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  3. Jajajaja xD andaa que no mirar..mira lo que le ha pasadoo jajaj
    Me ha encantado la última frase..
    Y a fran pegádalo a Celeste..que bajo ha caido..pero bueno, una buena patada (en este caso rodillazo) en sus partes nobles y ala xD

    Publica pronto :D

    Besoos

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  4. Maaadre qe verguenzaa!! =$
    Fraan...maas qe payaso!
    tiia,me encanta *.*
    Puubliiica prontoo pero yaa!
    Un besaaazoo :)

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  5. Me encanta, joer con fran...
    Haz prono el siguiente, me has dejado con la intriga

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  6. hola!!
    cuanto tiempo sin pasarme!! pero tranquila ya em e puesto al dia!!!
    estoy intrigada! escribe mas xfa!!
    un besazo :)

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  7. me ha encantado tu blog, sigue escribiendo :D
    pasate por el mio, yo ya te sigo(L)

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  8. Madre del amor hermoso!!! No esperaba es de Fran y menos de helena, como no la ayudan ya no kiere saber de ellas!!! de verdad.... Pufff!!! me voy a por el siguiente, me encanta!!! xDDDD bss wapa

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